¿Te has parado a pensar alguna vez en qué estado se encuentran las bibliotecas de los centros penitenciarios? ¿En cómo facilitar y fomentar la lectura entre las personas privadas de libertad? Dentro del marco de las XVIII Jornadas Españolas de Información y Documentación, organizadas por FESABID, presento este vídeo como una llamada a la acción a las bibliotecas públicas para revertir la situación y mejorar el acceso a la lectura en los centros penitenciarios.

Las bibliotecas públicas tienen un papel fundamental a la hora de acercar la lectura a los centros penitenciarios, muchas veces faltos de medios y recursos para garantizar un acceso adecuado a los libros. Tanto el nuevo Manifiesto IFLA/UNESCO sobre Bibliotecas Públicas 2022 como el Plan de Fomento de la Lectura 2021-2024 son un ejemplo de esta importante labor. En este contexto de garantizar un mayor acceso a la lectura a los internos e internas de los centros penitenciarios, en los últimos años se han promovido diferentes acciones: clubes de lectura, encuentros en torno al libro y la lectura, charlas con autores, donaciones de libros, etc. Incluso se están llevando a cabo acciones cooperativas, como el Proyecto LEEN. Lecturas en el encierro, que recopila este tipo de iniciativas en el ámbito iberoamericano. Sin embargo, aún queda mucho por hacer. Es importante seguir concienciando sobre la importancia del compromiso social que tienen las bibliotecas en ámbitos como este y promover el desarrollo de nuevas acciones colaborativas entre las instituciones. Se trata, en definitiva, de fomentar que las bibliotecas públicas tengan un papel más destacado y que los esfuerzos no se concentren solo en fundaciones, asociaciones u organizaciones sin ánimo de lucro.